Redución de jornada laboral podría votarse tras huelga de hambre

La huelga de hambre iniciada por la abogada y activista María Luisa Luévano el pasado martes frente a la Cámara de Diputados concluyó hoy tras un compromiso por parte del coordinador del grupo parlamentario de Morena, Ricardo Monreal. Este le solicitó que no pusiera en riesgo su salud y se comprometió a revisar el dictamen que propone la reducción de la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales

Luévano, quien mantuvo su protesta durante 52 horas, fue recibida en las oficinas de Monreal junto a Susana Prieto Terrazas, ex diputada que renunció a la bancada morenista en la Legislatura pasada en desacuerdo por la falta de aprobación de esta misma iniciativa. Prieto destacó que Monreal se mostró dispuesto a iniciar un diálogo en la Comisión del Trabajo para evaluar la viabilidad de la propuesta. "Nos ha mandado a llamar Monreal para pedirle a Malú que levante la huelga de hambre y no afecte su salud, que hay muchas formas de luchar", expresó Prieto.

Monreal enfatizó la necesidad de alcanzar un consenso con los sectores económicos y anunció que las discusiones comenzarán el lunes en la Comisión del Trabajo. "Le pedí que no pusiera en riesgo su vida y le planteé iniciar un diálogo", comentó el político, asegurando que se buscará un acuerdo con los empresarios para facilitar el avance del dictamen.

El dictamen sobre la reducción de horas laborales está listo para ser votado desde abril de 2023

Prieto insistió en que no debería ser modificado, sino simplemente sometido a votación. Sin embargo, no descartó que se presenten reservas para ajustar el texto, especialmente en lo que respecta a una posible implementación gradual de la reducción. "Habrá que trabajar con la presidenta de la Comisión de Trabajo y convocar a los empresarios para que nos digan cómo sí va a transitar", añadió.

Al ser cuestionada sobre posibles traiciones dentro del grupo parlamentario de Morena, Prieto manifestó su confianza en que los legisladores cumplirán con el compromiso adquirido. "Predisponernos a que alguien va a ser un traidor sería estar 'futurizándonos' y echar a perder lo que ha logrado la compañera Malú con esta huelga", afirmó.

Por su parte, Luévano expresó su satisfacción por el diálogo iniciado con Monreal y su esperanza de que se logre una modificación al artículo 123 de la Constitución, relacionado con las jornadas laborales. "Confío en que juntos vamos a buscar el cómo sí llegar a modificarlo", comentó tras finalizar su huelga.

Al reflexionar sobre si era necesaria una huelga de hambre para atraer la atención sobre esta demanda, Luévano lamentó haber tenido que recurrir a este extremo. "¡Qué triste que tuve que haber hecho una huelga de hambre para que pudieran reaccionar en algo tan sencillo!", concluyó

La situación actual pone de relieve las tensiones entre las demandas sociales y las respuestas legislativas. La presión ejercida por activistas como Luévano ha sido crucial para reactivar el debate sobre condiciones laborales en México, donde desde 1917 no se ha realizado una modificación significativa en materia de descanso laboral.

La propuesta de reducir la jornada laboral ha encontrado eco en diversos sectores sociales, quienes consideran que una disminución en las horas trabajadas podría mejorar la calidad de vida y productividad de los trabajadores. Sin embargo, también existen preocupaciones sobre cómo esta medida podría afectar las dinámicas económicas actuales.