Pasado el proceso electoral, es normal ver las calles llenas de pancartas de plástico con imágenes de los políticos, muchos de los cuales se mantienen por particulares que las dejan para tapar lavadoras, pilas o simplemente olvidan quitarlas, algunas otras fueron destruidas por el partido opositor, a pesar de que esto representa un delito, dejando los plásticos en la vía pública.
El artículo 210 de Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales obliga a que los partidos políticos retiren todo tipo de propaganda de las calles y tener un proceso de reciclaje, la realidad es que los partidos no cuentan con un plan de reciclaje público, sin un proceso de recolección, tratamiento y destino final.
Greenpeace México, aseguró que gran parte del material utilizado para propaganda es de plástico y puede tardar decenas y cientos de años en degradarse.
El INE exige a los partidos políticos en el Reglamento de elecciones que informen sobre los materiales utilizados y su plan de reciclaje.
Reglamento de Elecciones
Fuente: INE
De acuerdo a datos de proveedores locales en esta contienda electoral se utilizó menos lonas, estimando que de 10 toneladas que se utilizaban para la impresión de carteles y espectaculares, se redujo a dos toneladas.
La cantidad de basura electoral generada durante la jornada en Zihuatanejo, se mide hasta que se pide un informe a los partidos sobre su manejo de residuos donde se detalla las toneladas que se reciclaron en lonas o folletería. Mientras tanto las calles aún lucen llenas de pancartas y siguen sin retirarse por tratarse de domicilios particulares.