A seis meses de pandemia y a pesar de que el transporte público es uno de los principales focos de contagios, en Zihuatanejo el 15 por ciento de choferes continúan renuentes a utilizar el cubrebocas para evitar la propagación del Covid-19, informó el Delegado de la Dirección General de Transportes del Estado, René Rodríguez Rosas, al precisar que ya no habrá flexibilidad y comenzarán a multar a quienes desacaten esta medida.
En entrevista telefónica el funcionario estatal reconoció que la mayoría de los trabajadores del volante hacen caso, sin embargo, así sea una minoría, es esa misma minoría la que pueda genera que los contagios sigan creciendo, es por eso que dijo que ya no van a tener consideraciones como en el puerto de Acapulco, en donde diariamente realizan hasta 10 sanciones.
Destacó que hubo apertura al entendimiento desde un principio sin necesidad de aplicar la ley, no obstante parece ser que eso no fue tomado en cuenta por los choferes que todavía continúan sin hacer caso; asimismo, agregó que ya ha platicado con los líderes y permisionarios quienes han coincidido en que se aplique la ley.
René Rodríguez dijo además que el uso de cubrebocas no tiene otra intención mas que salvaguardar la integridad y salud de los choferes, de sus familias y de los usuarios que diariamente abordan los taxis y urvans.
Con relación a los filtros de revisión que tienen la finalidad justamente de vigilar la implementación de este artefacto de protección personal, dijo que dejaron de hacerlos porque algunos supervisores y empleados se enfermaron, pero poco a poco se han incorporado, con eso en cuenta, esperan poder reactivarlos nuevamente en los próximos días.