Desde muy temprana hora, las enfermeras están listas en sus puestos en las mesas de atención a los adultos mayores que desde el 9 de abril recibieron la vacunación anticovid-19 en su primera fase y en que desde el 29 del mismo mes están trabajando con el refuerzo.
Las enfermeras son las encargadas de la labor más importante en este programa nacional, aplicar la dosis al adulto mayor de 60 años, así como de monitorear la salud de los ancianos quienes en todo momento están vigilados.
Acostumbradas a un horario laboral de ocho horas dando vueltas por un hospital sin sentarse, en las enfermeras no mengua el buen trato para los adultos mayores, que se les devuelve en bendiciones por parte de los ancianos, incluso algunos les llevan dulces o un detalle en reconocimiento a su labor.
Para la jefa de enfermeras, Yadira Covarrubias, dijo que pese al cansancio es gratificante atenderlos.
En estas jornadas de vacunación, los horarios laborales se han extendido hasta once horas seguidas, una situación a la que las enfermeras están acostumbradas, porque en muchas ocasiones en la atención a la salud deben doblar turnos, algo que agradecieron sus familias entiende.
La enfermera Adriana Selenne Vara, manifestó que pese al cansancio de atender a cerca de mil personas, se sienten felices de cuidar a la población más vulnerable que se está protegiendo.