Especialistas mexicanos realizan un monitoreo en el Archipiélago de Revillagigedo, un conjunto de tres islas (Socorro, Clarión, y San Benedicto) y un islote (Roca Partida) que en 2017 fue declarado como un área natural protegida, bajo la categoría de Parque Nacional, por la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp).
El grupo científico analizó dos diferentes tipos de compuestos químicos, los hidrocarburos aromáticos policíclicos y los ftalatos, los cuales se distinguen por permanecer durante largos períodos en el ambiente, por su alto potencial de transportación y de bioacumulación.
José de Jesús Olmos, investigador de la FES Cuautitlán, mencionó que los contaminantes orgánicos persistentes (COP) son conocidos por ser cancerígenos y mutagénicos, de modo que pueden provocar en especies marinas alteraciones en el sistema inmune, problemas reproductivos, cardiovasculares y cognitivos y hasta la aparición de cáncer.
Para llevar a cabo el análisis se empleó una técnica de preparación de muestras conocida como Dispersión de matriz en fase sólida (DMFS), una técnica de bajo costo, rápida ejecución y amigable con el medio ambiente, ya que se puede miniaturizar generando una menor cantidad de residuos.
Este procedimiento comprende varias etapas, en las que se incluye la homogenización, limpieza y recuperación de los analitos de interés. Los extractos obtenidos de las muestras de músculo de mantarraya fueron analizados por cromatografía de gases acoplada a espectrometría de masas, lo que permitió encontrar concentraciones del orden de las partes por billón (ppb).
Después de realizados los estudios, se comprobó que en cinco de 18 ejemplares estudiados estuvieron presentes compuestos tóxicos.
"Con los resultados que generamos podemos concluir que en los individuos analizados no existe un daño significativo, pero sí existe la presencia de algunos contaminantes que son tóxicos", concluyeron los especialistas participantes.
De momento, el investigador de la Facultad y su grupo de estudiantes esperan que la metodología empleada pueda ser aplicada por el Centro Interdisciplinario de Ciencias Marinas (CICIMAR) del IPN, para cumplir con el objetivo inicial del proyecto: conservar la biodiversidad de la zona de Revillagigedo y establecer medidas precautorias y de acción a partir de los resultados obtenidos.
Actualmente el proyecto ha alcanzado nuevas dimensiones, ya que se busca extender la técnica DAFS para identificar la presencia de los COP en criaderos de trucha y tilapia del Estado de México y la Ciudad de México.