La Dirección de Inteligencia Nacional de Estados Unidos, junto a varias organizaciones ambientalistas, ha emitido alertas sobre la realización de experimentos climáticos no regulados en México. Estos experimentos, que incluyen el manejo de la radiación solar y la inyección en aerosoles en la estratósfera, se están llevando a cabo con el objetivo de mitigar los efectos del cambio climático, aunque sus resultados son cuestionables y carecen de transparencia, según lo reportado por estas organizaciones.
Avril D. Haines, directora de Inteligencia Nacional de EE. UU., quien en un memorándum advirtió sobre los riesgos que representan los "actores no estatales" en la gobernanza internacional. Este documento reveló que una nueva empresa, European Astrotech, había realizado un experimento no regulado en México el año anterior y otro en el suroeste de Estados Unidos en febrero de 2024. La firma británica lanzó globos con dióxido de azufre a la atmósfera para generar conciencia sobre la falta de avances en la lucha contra el cambio climático y promover iniciativas comerciales en geoingeniería.
La geoingeniería implica intervenciones a gran escala en los océanos, suelos y atmósfera con la intención de reducir los efectos del calentamiento global. Esto incluye técnicas para bloquear o reflejar la luz solar y eliminar el dióxido de carbono, uno de los principales gases responsables del efecto invernadero
A pesar de las intenciones que parecen buscar soluciones al grave problema del cambio climático, las empresas que implementan estas técnicas son criticadas por ambientalistas y científicos. Se argumenta que estas medidas no abordan las causas fundamentales del cambio climático y que, además, lucran con "soluciones" que ofrecen beneficios a corto plazo. Un ejemplo notable es el trabajo del investigador Andrew Lockley con European Astrotech, quien realizó experimentos al aire libre relacionados con el manejo de la radiación solar (SRM) bajo el proyecto SATAN (Transporte y Nucleación de Aerosoles Estratosféricos). Estos experimentos consistieron en lanzar globos meteorológicos desde el Reino Unido que liberaban dióxido de azufre en la estratósfera.
La empresa Make Sunsets también ha estado involucrada en estos experimentos, lanzando un globo en Baja California sin ningún tipo de participación pública o supervisión científica. Su objetivo aparente es vender "créditos de enfriamiento", cobrando a empresas que buscan evitar reducir sus emisiones a cambio de liberar grandes cantidades de dióxido de azufre para "refrescar" la atmósfera. En enero de 2023, tanto la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) como el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) condenaron estos experimentos y prohibieron su práctica debido a la falta de acuerdos internacionales que regulen las actividades de geoingeniería solar.
La Semarnat ha establecido una estrategia clara para prohibir estas prácticas dentro del territorio nacional. Bajo el principio precautorio y conforme al Protocolo de Montreal, que protege la capa de ozono y combate el cambio climático, se detendrán todas las actividades a gran escala relacionadas con geoingeniería solar en México. Esta decisión se basa en evidencias que indican que tales técnicas no reducen efectivamente las emisiones de gases de efecto invernadero y pueden tener impactos negativos desiguales sobre el ambiente y la salud pública
Los experimentos realizados por Make Sunsets presuntamente se llevaron a cabo sin obtener el consentimiento libre e informado necesario según las normas establecidas para proteger los derechos indígenas. Este tipo de intervenciones ha sido criticado por ser una forma moderna del colonialismo climático, donde empresas del norte global utilizan territorios del sur global como campos de prueba para sus tecnologías.