Si eres productor o estás interesado en este cultivo, asiste este sábado 7 de diciembre al rancho San Martín y descubre las posibilidades que el chiltepín ofrece para la economía local e internacional.
El taller de pizca y secado de chiltepín será una experiencia única para aprender las técnicas necesarias para recolectar y preservar este valioso fruto, conocido como el "oro rojo del desierto." Gracia Gómez, investigadora del Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste (CIBNOR), destacó la importancia de realizar estos procesos correctamente:
"Les vamos a enseñar qué chiltepines pizcar y cuáles no, además de cómo secarlos correctamente. Es crucial para preservar su calidad y maximizar su valor económico," señaló Gómez.
Este taller forma parte de un proyecto ambicioso que impulsa la producción del chiltepín en Baja California Sur, con tres enfoques clave:
1. Cultivo en parcelas: Implementado en comunidades como El Valle y Los Planes, con siembras de un cuarto de hectárea.
2. Producción en traspatios: Una iniciativa diseñada para adultos mayores de escasos recursos, que busca fomentar el autoconsumo y generar ingresos.
3. Reforestación:Enfocada en recuperar poblaciones silvestres en áreas como San Antonio y Miraflores.
Con un precio que puede alcanzar los 2 mil pesos por kilo seco, el chiltepín tiene gran relevancia económica y cultural en México. Sus usos incluyen platillos tradicionales como menudo, pozole y aguachile, además de innovaciones como la nieve de chiltepín lanzada en Sonora.
El proyecto también contempla la exportación a mercados internacionales. Actualmente, se exploran oportunidades en China, donde podría emplearse en la elaboración de gas pimienta, y en Japón, donde es utilizado para proteger cableado de electrodomésticos.
"Estamos en pláticas con el cónsul de China en México para concretar la exportación, pues allá tiene un buen precio," afirmó Gracia Gómez, subrayando la proyección internacional del chiltepín.
Más allá de su valor comercial, este proyecto tiene un enfoque social y ambiental. Apoya a sectores vulnerables, fomenta la diversificación económica rural y busca preservar esta especie icónica del desierto mexicano a través de iniciativas de reforestación.
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