Fueron dados de alta cuatro de los diez migrantes que estaban internados en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Huixtla, Chiapas, luego de que resultaran heridos cuando militares dispararon contra la camioneta de redilas en la que eran transportados por los llamados "coyotes".
Testigos aseguran que los traficantes de personas dispararon contra los miembros del Ejército, por lo que los uniformados repelieron la agresión.
Cuatro personas más permanecen hospitalizadas. Los migrantes aseguran que ellos no estaban armados.
El hecho dejó seis migrantes muertos y 10 heridos, cerca de la ranchería Los Cocos, en el tramo carretero que comunica a los municipios de Villa Comaltitlán y Huixtla, en la costa de Chiapas el martes 1 de octubre. Se dirigían a la Ciudad de México.
Los extranjeros que murieron fueron trasladados al Servicio Médico Forense, donde se determinó que presentaban múltiples lesiones en espalda, cabeza y extremidades, provocadas por balas calibre 5.56x45 mm de los fusiles reglamentarios FX-05.
La Fiscalía General de la República informó que los fallecidos son una persona de Honduras, otra de Perú y tres de Egipto. La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, dijo que la sexta de las víctimas era de El Salvador.
Los soldados involucrados fueron puestos a disposición de la FGR.
Sedena denuncia a militares por asesinato de migrantes
La Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo informó que la propia Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) presentó una denuncia contra los militares que dispararon y asesinaron a 6 migrantes en Chiapas; el hecho ocurrió el pasado martes, alrededor de las 20:50 horas.
También dio a conocer que la Fiscalía General de la República (FGR) ya investiga el motivo de por qué los militares dispararon contra estos migrantes.