La migración humana está referida a los procesos de migración voluntaria o forzada de personas de su país de origen o residencia, de manera permanente o temporal.
Algunos de los principales motivos de la migración es la posibilidad de mejorar la calidad de vida para los migrantes y sus familias, así como superar las desigualdades económicas, sociales y demográficas de sus países de origen como hambre, desempleo, conflictos bélicos, persecuciones por motivos políticos, ideológicos o religiosos, cambios climáticos y catástrofes naturales.
Por otra parte, también influye el hecho de que los países más desarrollados requieren de mano de obra que difícilmente pueden cubrir con residentes locales, por ello se requiere la presencia de inmigrantes que puedan realizar cierto tipo de tareas, con una baja remuneración y sin beneficios adicionales en la mayoría de los casos.
Paradójicamente, las políticas migratorias restrictivas impuestas por los países aunado a las manifestaciones de xenofobia han limitado los procesos, contribuyendo al incremento del fenómeno social de las "personas ilegales" o "sin papeles", por ello en la actualidad, los esfuerzos se centran en la cooperación internacional para la protección de los derechos humanos de los migrantes, así como fomentar el desarrollo y la sostenibilidad de las naciones.