Si es verdad que la infraestructura del municipio es obsoleta y arcaica, también hay que ver la otra cara de la moneda, dónde ciudadanos no hacen del todo para la conservación de esta infraestructura, ya que se ha podido observar, que pese a los esfuerzos de las autoridades por mantener en orden la ciudad y la carretera, algunas personas continúan tirando agua, afectando con ello la carpeta asfáltica o simplemente, tirando la basura en lugares como calles o arroyos, lo cual se ha convertido en un problema de nunca acabar.