Después de que el gobernador de Sinaloa Quirino Ordaz Coppel declaró ley seca al restringir la venta de bebidas alcohólicas en el estado para evitar la propagación de covid-19.
La suspensión del consumo de cerveza, vinos y licores podrían provocar irritación y ansiedad en las personas que están habituadas a consumirlos y tienen una dependencia considerable de estas bebidas según lo indicó Nancy Lerma, directora del Centro de Atención Juvenil de Los Mochis quien exhortó a la población que presenta sintomatologías de esta índole a atenderse de manera profesional.
Señaló que durante la contingencia han ingresado alrededor de 18 nuevos casos con problemas de adicciones a sus instalaciones , de igual forma continúan brindando la atención a sus pacientes con las medidas de higiene necesarias.
" Los pacientes no han dejado de acudir, las medidas sanitarias que tenemos es que los atendemos de manera individual o familiar cuando son tres personas y guardando todas las medidas de seguridad"