La discapacidad en México es invisible. El país no cuenta con cifras oficiales sobre las personas discapacitadas que lo habitan y mucho menos datos sobre los diferentes tipos de discapacidades, lo que impide ofrecer una atención y un tratamiento adecuado a estos ciudadanos.
De acuerdo a la última encuesta del INEGI, revela que 7.1 millones de habitantes en el país no pueden o tienen una dificultad para hacer alguna actividad como caminar, escuchar, ver entre otras.
Ser mamá no es una tarea fácil, aún más cuando se tiene un hijo especial, ellas se convierte en ángeles y, una guerrera en busca de la felicidad y el desarrollo de sus hijos.
Patricia Díaz, tiene 20 años viviendo con una discapacidad, comparte que lo más complicado es aceptar el problema y el reto es aprender a vivir con ello.
Además revela que gran parte de las "mamás especiales" se quedan solas, pues en la mayoría de los casos el padre de familia abandona el hogar al no poder con la responsabilidad que implica tener un "hijo especial".
Para lograr desarrollo y bienestar de estas personas se requiere de un esfuerzo conjunto y coordinado, por ello la colaboración de docentes en centros de atención múltiple es clave.
Martín Rodríguez, tiene poco más de 13 años trabajado como docente en el Centro de Atención Múltiple número 26, para él, trabajar con niños y jóvenes con necesidades especiales es toda una satisfacción.
Pese a todas las situaciones adveras a las que se enfrentan familiares que viven con una discapacidad, no hay límites, pues cuando una puerta se cierra otra se abre, los pequeños logros se convierten en grandes avances, pero sobre todo para estos ángeles "un día más es un oportunidad.