Paredes agrietadas, pisos dañados entre otras fallas de infraestructura son visibles en cada aula y pasillos de la escuela primaria Adolfo López Mateos, ubicada en la comunidad de Juan José Ríos. Así más de 500 niños distribuidos en 12 grupos acuden día a día a clases a la institución.
En Sinaloa se estima que alrededor del 50 por ciento de instituciones requieren de algún tipo de rehabilitación, muchas de ellas planteles centenarios donde la labor se realiza cada día sin importar las condiciones.
"Son muchas las necesidades, le comenté a la señora que los techos, pues se están cayendo, ahorita si se observa hay ladrillo que pueden caerse en cualquier momento, hay algunos que están ya sostenidos por cualquier cosita".
Además padres de familia temen que el día menos pensado fragmento de las aulas o pasillos se derrumben, por lo que extienden el llamado a las autoridades en busca de atender las múltiples necesidades que este plantel manifiesta. Consideran que los menores estudian bajo un riesgo latente.
"Es un riesgo ahorita los salones, estas aulas de aquí, son completamente un riesgo para los niños, son los niños de primero, los más chiquitos los que están ahí", señaló María Castro, madre de familia.
A está problemática se suma el mal estado del poco inmobiliario que se tiene, es decir, es insuficiente las butacas para cubrir el número de niños que acuden al plantel. Sin duda la educación en México sigue siendo un reto constante.