Durante el actual gobierno, se ha constatado la precariedad laboral de los policías, quienes trabajan turnos de 24 horas o más, sin sueldos y prestaciones adecuados, no cuentan con equipamiento ni capacitación suficientes y, en algunos casos, soportan tratos denigrantes y violencia al interior de sus corporaciones.
Lo anterior explica que, en el actual sexenio se hayan registrado al menos 129 paros, 51 emplazamientos a paro y 73 manifestaciones de policías en la mayoría de los estados del país.
Además, de acuerdo a registros periodísticos, en lo que va del sexenio se han contabilizado al menos 1,556 asesinatos de policías, lo que significa más de uno al día en promedio.
Para el especialista en temas de seguridad, Martín López Félix, en Sinaloa la realidad a la que se enfrentan policías municipales y estatales no es diferente.
"Yo creo que han dejado de invertir en la seguridad pública del estado de Sinaloa como en muchos estados de la república porque han tratado de levantar a la Guardia Nacional y han ido quitando aquellos apoyos que había de Fortaseg" esos apoyos que servían para la policía municipal".
En México no tenemos suficientes policías locales de hecho, contamos con un policía por cada mil habitantes, cuando la Organización de las Naciones Unidas establece al menos 1.8 por cada mil habitantes.
Hasta 2021, a nivel nacional contábamos con 385 mil policías preventivos estatales y municipales.
Pero además, a la falta de elementos se suma la eliminación de recursos económicos por parte de la federación, a pesar de que la mayoría de los delitos de alto impacto van en aumento.
"Pues lo que se necesita es apoyo económico, que vengan esos apoyos que venían del Gobierno Federal, y que los Gobernadores y presidentes municipales inviertan en buenos salarios para los policías y que además la infraestructura y el equipamiento que sea mejor"
De acuerdo a la Asociación Civil "Causa en Común" señala que la eliminación de recursos al fondo del programa de fortalecimiento para la seguridad, conocido como FORTASEG, recorta la posibilidad de mejorar las condiciones laborales, salariales y de servicio del personal de las policías.