La apertura de la frontera mexicana a la importación de alimentos ha puesto en riesgo el estatus fitosanitario del sector porcícola ya que con ello se incrementa la posibilidad de ingresar al país enfermedades como la "peste porcina".
" Es una amenaza para la sanidad de nuestras instalaciones y granjas , estamos expuestos a varias enfermedades entre ellas la fiebre porcina africana "
El presidente de la Asociación de Porcicultores en el norte del estado, Edgar Quintero reveló que las importaciones de carne de cerdo al país, representa una competencia desleal para quienes mantienen altos estándares de calidad en la producción de carne de cerdo pero además afecta el precio en el mercado local.
"No hay un beneficio para el consumidor , el consumidor no ha visto reflejados esos precios que están supuestamente más bajos en otros países pero que son carnes de mucho tiempo, congeladas"
El consumo de carne de cerdo en México llegará a los 2.4 millones de toneladas, 2% más que en 2023, sin embargo factores como la sequía repercutirán seriamente en la producción del próximo año, no por la mortandad de animales, sino por la escasez de alimento que representa más del 75% de los costos de producción.
Mientras que la previsión de importación será de 190 mil toneladas , lo que supone un descenso del 5% respecto a los niveles de importación del año anterior.
Ante esto líderes porcícolas señalan que la actividad es cada vez menos rentable, ya que se ha convertido en un oficio de subsistencia, más que un negocio.