"Ahorita esta situación nos ha bajado un 70 % los clientes que no vienen, cierra bares casinos y la gente no sale a bolearse".
"El aislamiento social es una obligación y una responsabilidad en tiempos de contingencia sanitaria, incluso, es la clave para frenar la propagación del covid-19; sin embargo para muchos mexicanos quedarse en casa significa quedarse sin ingresos para poder llevar el alimento a la mesa, este es el caso de Don Ramón que se dedica al oficio de bolero en Los Mochis.
Nos comparte que antes de la contingencia llevar el alimento para sus 5 hijos ya era complicado, pero ahora a raíz de la emergencia sanitaria, las calles de la ciudad se han quedado desoladas por lo que hay días en los que ni siquiera logran obtener ni los 100 pesos por sus servicios.
"Así es nosotros no podemos quedarnos en casa, nosotros tenemos que salir a corretear la chuleta, nosotros vivimos al día, en este negocio si trabajamos ganamos y si no trabajamos no ganamos".
Don Ramón se dice asombrado por la situación económica que cada día se pone más complicada, esto dice espanta más que el "famoso coronavirus".
Con el rostro preocupado, señala que si la cuarentena se alarga más, y los negocios siguen cerrados, se desatará un grave problema social, pues muchas familias que se han quedado sin ingresos en su desespero y necesidad de llevar el sustento a la mesa serán capaz de todo para hacerse de recursos.
" Si me espanto la verdad, no sabemos qué va a pasar, según son 30 días, si es que no se extiende más, la verdad estamos tensos, estamos espantados, haber cómo sobrevivimos a esto".
"Si no, nos mata el coronavirus, nos moriremos de hambre", refieren boleros en Los Mochis quienes se dicen asombrados tras el fenómeno que aseguran no se había visto en otros años.