En México ha habido iniciativas para introducir los biocombustibles, sin embargo no han funcionado, en parte porque no hay una coordinación entre el hacedor de políticas públicas, los productores y el distribuidor, se introducen regulaciones para incentivar la producción de combustibles, pero realmente nunca llegan al punto de realizarse, señaló el investigador del CONACYT, Héctor Amórtegui, en un reciente arartículo sobre Biocombustibles: Retos y Oportunidades en México.
Javier Barrios Gómez, titular del INIFAP, considera que nuestro país está en pañales en el proceso de los bioenergéticos.
Sin embargo no todo es negativo, pues se cuenta con la tecnología suficiente para trabajar en cultivos con alto potencial para la generación de bioenergéticos como la jatropha y la higuerilla.
Además, ven potencial en Sinaloa para la obtención de biocombustible a partir de oleaginosas.