Han transcurrido 12 días desde el descarrilamiento de un tren cargado con maíz en la comunidad de Pueblo Viejo, y los vagones permanecen en el lugar del accidente, algunos de ellos inclinados peligrosamente hacia la calle, generando preocupación entre los habitantes.
El tren, que tenía como destino el norte del país, sufrió el percance dejando varios carros fuera de las vías y el maíz esparcido en los alrededores. Vecinos han aprovechado para recolectar el grano, mientras el escenario de los hechos no ha sido modificado desde entonces.
Sin embargo, autoridades de Protección Civil municipal informaron que los vagones no representan un riesgo inminente para la población, y que ya se encuentran a la espera de personal especializado de Ferromex del área de recuperación, quienes serán los encargados de intervenir.
Los vagones, al presentar severos daños estructurales, no serán rehabilitados, sino que serán cortados con soplete y transportados por tierra, señalaron las autoridades.
A pesar del tiempo transcurrido, no se ha dado a conocer una fecha exacta para el retiro de los restos del tren, por lo que los ciudadanos insisten en la urgencia de atender la situación, ya que muchos vehículos y peatones circulan cerca de los vagones.
Las autoridades reiteran el llamado a la población a evitar acercarse a los vagones y mantener precaución, mientras se concreta el operativo de remoción por parte de la empresa ferroviaria.
