El presidente del Consejo Ejecutivo de Empresas Globales (CEEG), Frédéric García, señaló que el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), forma parte de las más de cien propuestas de política pública del organismo para que el país llegue al 2030 como la quinta economía exportadora en el mundo.
"Empujar el tema de infraestructura en el país es importante, desde nuestra perspectiva el que se consolide un gran aeropuerto para la Ciudad de México y para todo México es de singular relevancia", insistió tras moderar una ponencia en el XXV Congreso de Comercio Exterior Mexicano.
Señaló que el CCEG considera que se debe concluir lo más rápido posible el actual proyecto aeroportuario que está en curso, ya que la carencia del mismo le resta competitividad al país."Esto puede frenar y debilitar la ambición exportadora que queremos para México", reiteró.García adelantó que el organismo ya le expuso directamente al presidente electo Andrés Manuel López Obrador, y a su equipo de transición, la necesidad de modernizar la red ferroviaria, de autopistas, de puertos y de aeropuertos, como parte del desarrollo de infraestructura que requiere el país.
"El gran problema y el principal obstáculo que tienen México para ser el quinto exportador mundial es que debe de tener infraestructura de primer mundo", aseveró.A ejemplo de las deficiencias de México, comentó está el crecimiento desigual del sureste del país en comparación de otras regiones del territorio nacional."El sureste no se ha podido desarrollar al mismo nivel por la falta de acceso a energía y gas, pero también, por la carencia de conectividad tanto en la parte digital y carretera, por ello estamos a favor de que se refuerce la parte de infraestructura en México".
El líder del Consejo destacó estar de acuerdo en la estrategia propuesta del nuevo gobierno para que el sector privado se convierta en motor del desarrollo de infraestructura y de crecimiento del país."Que el sector privado participe también es parte de las más de cien propuestas donde decimos que el Estado debe abocarse a financiar temas de seguridad educación, soberanía, y que deje involucrar al sector privado en proyectos de infraestructura que sean rentables", afirmó.
Con esa premisa, subrayó, es que el sector privado nacional y extranjero siempre estará dispuesto a participar en la materialización de proyectos de infraestructura siempre y cuando los mismos añadan el componente de rentabilidad para la inversión considerada.