Tras la petición de Andrés Manuel López Obrador, por medio de su esposa Beatriz Müller, al presidente de Austria, Alexander van der Bellen, de pedir prestado el penacho de Moctezuma, expuesto en el Museo Antropológico de Viena, este no podrá ser trasladado a nuestro país, "al menos en los próximos diez años", de acuerdo con Gerard van Bussel, curador de las colecciones de América del Norte y Central de esta institución pública austríaca.
"El penacho es demasiado frágil", dijo van Bussel, está formado principalmente por material orgánico, y cualquier vibración "en el aire o la carretera lo destruiría".
"Se lo han apropiado por completo", escribió AMLO, asegurando que "ni a Maximiliano de Habsburgo se lo prestaron cuando nos invadieron e impusieron al llamado Segundo Imperio Mexicano".
El penacho de Moctezuma, está hecho de miles de plumas de Quetzal, unidas por centenares de placas de oro.
Se desconoce cómo llegó a Austria, pero muchos historiadores asumen que fue un regalo de Moctezuma al conquistador español Hernán Cortés, que después se la envió al emperador Carlos I, de la casa de Habsburgo.
Gracias a un acuerdo bilateral entre Austria y México, los ciudadanos mexicanos que presenten su pasaporte a la entrada del museo pueden ver el penacho de manera gratuita.
La escritora Beatriz Gutiérrez Müller, está de gira por algunas capitales europeas para "obtener piezas históricas" mexicanas y exhibirlas en el país durante la celebración del bicentenario de su independencia en 2021.