A pocos días de la jornada electoral del próximo 6 de junio, la violencia contra políticos y candidatos se ha disparado en el periodo de campañas. Ayer fue ejecutado en Ciudad Obregón, Sonora, el candidato de Movimiento Ciudadano a la Alcaldía de Cájeme, Abel Murrieta. Con su muerte, se eleva a 83 la cifra de políticos y candidatos y aspirantes asesinados.
El Indicador de Violencia Política de Etellekt Consultores, dio a conocer que hasta el momento se tienen registrados 563 hechos violentos en contra de políticos y candidatos, con un saldo de 83 asesinados, incluyendo 32 aspirantes.
Las agresiones en contra de políticos, aspirantes y candidatos en el actual proceso abarcó a 31 entidades y 321 municipios de la república (13% del total de municipios).
Estos casos ocurrieron en el periodo del 7 de septiembre del 2020 y mayo 13 de este año.
El 76 por ciento de las 83 víctimas mortales, eran opositores a los gobiernos estatales y 12 eran mujeres.
Al igual que en la elección de 2018, las amenazas se convirtieron en el principal instrumento de violencia.
La semana pasada el equipo de campaña del candidato del PRI a la Alcaldía de Morelia, Guillermo Valencia, fue Víctima de un atentado, dos personas resultaron heridas.
Los actos de intimidación y maltrato físico y/o verbal (infracciones contra la dignidad), representaron la tercera agresión mas recurrente cometida de parte de militantes de partidos y grupos de choque, en contra de candidatos opositores y de sus colaboradores, en actos proselitistas o de promoción del voto en colonias, plazas públicas y zonas habitacionales.
Los datos son preocupantes. De las 25 víctimas de privación ilegal de la libertad, una perdió la vida (el alcalde de Temósachic, Chihuahua), y otra más permanece desaparecida (el aspirante del PRI a la alcaldía de Mezquitic, en Jalisco. Las otras 23 víctimas fueron liberadas.
Se registraron también 14 víctimas de homicidio en grado de tentativa, seis de las cuales resultaron con heridas de arma de fuego. de las 14 víctimas, seis aspiraban a cargos de elección.
Además de 15 denuncias de candidatos y militantes de partidos en contra de funcionarios públicos, principalmente policías estatales y municipales, por presuntos actos de intimidación y hostigamiento en su contra.
El proceso electoral federal concurrente de 2021 es ya el segundo más violento desde el año 2000.