La extorsión es un delito de alto impacto que se define como la coerción ejercida por una persona, grupo u organización con fines de lucro (para sí mismos o para terceros), que mediante engaños, amenazas o violencia, obliga a una persona a dar, hacer o abstenerse de hacer algo, con el propósito de perjudicar su patrimonio y su bienestar emocional.
El presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec), Cuauhtémoc Rivera, informó que en México hay aproximadamente 1,2 millones de personas dedicadas a pequeños negocios, como "tienditas". En uno de cada cuatro de estos establecimientos, los propietarios se ven obligados a pagar a delincuentes para poder operar.
Rivera señaló que este tipo de delitos se ha extendido a al menos dos terceras partes del territorio nacional, es decir, en 22 estados. Más allá del monto que se exige, el problema más grave es la aceptación creciente de esta situación como algo inevitable. En ninguna economía moderna es normal pagar para trabajar, y el cobro de derecho de piso debe considerarse un impuesto deplorable e inaceptable.
Según la Anpec, los extorsionadores pueden llevarse hasta 20,000 pesos al mes, mientras que la cantidad mínima que exigen es de 2,500 pesos.
Rivera explicó que los extorsionadores operan contactando a los comerciantes y detallando información personal, como horarios de llegada y salida, así como horarios escolares de los hijos. Ofrecen "seguridad" a cambio de dinero, insinuando que de no pagar podrían sufrir daños. Muchos comerciantes, para proteger a sus familiares, acceden a pagar, aunque algunos optan por trasladar sus negocios para evitar ser ubicados por los delincuentes.
La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) reporta que se realizan más de una extorsión por hora a nivel nacional, pero solo el 4% de estos delitos son denunciados.
La falta de denuncia se debe al temor de las víctimas, quienes temen represalias si se presentan ante la ley. Además, demandar requiere pruebas, testigos y detalles específicos, lo cual disuade a muchos de reportar estos delitos.
Actualmente, las extorsiones se presentan en diversas modalidades en todo el país, siendo las extorsiones indirectas, realizadas a través de teléfonos celulares o redes sociales, las más comunes. Estados como Los Mochis, Obregón, Ciudad de México, Colima y Guanajuato han emitido alertas sobre esta práctica, con la llamada telefónica siendo el método predominante.
El gobierno de México ofrece varios consejos para prevenir extorsiones: evita compartir información personal con desconocidos, mantén una comunicación constante con tu familia, no confíes en llamadas que informen sobre premios, y nunca deposites dinero sin verificar la autenticidad de la solicitud. Además, es recomendable colgar en los primeros 30 segundos de una llamada sospechosa, ya que después de ese tiempo, los delincuentes tienen más posibilidades de engañarte.