La celebración del 10 de mayo es una fecha especial, sin embargo existen lugares donde la celebración es completamente diferente y eso se vive en el interior del Penal de San Miguel.
Desde primeras horas, madres, esposas, hijos e hijas llegan a las instalaciones del penal más grande de Puebla, aquí no hay desayunos y comidas en restaurantes para las mamás, el momento más difícil ES cuando los menores ingresan al lugar para convivir con la persona que les dio la vida
"Venimos a celebrarlo acá y pues traemos gracias a Dios a los niños para que pues los dejen pasar ya que por la situación no los han dejado verlos, ya han pasado varios tiempos que por la pandemia dejaron de entrar y ya es difícil para entrar, entonces quien sabe como nos vaya ahorita".
Este 10 de mayo es muy diferente, cuatro grandes paredes rodean la visita del día de la madre.
"Pues se siente feo no, porque sinceramente no es lo mismo que la persona esté afuera y que puedas hacer todo lo que quieras a que ahorita está adentro, se siente algo raro, distinto y que pues que se puede hacer, las cosas pasan por algo".
Los regalos aquí sí existen, la visita reconforta y da ánimos a las madres adentro quienes tienen que luchar contra el sistema, la soledad y vivir alejados de la familia.
"Traemos comida, traigo ropa, rosas porque pues de hecho se van a regalar allá".
Ingresar no es difícil para la familia, lo difícil es salir de San Miguel dejando a la mamá adentro, se parte el corazón al saber que mamá dormirá en este lugar y terminará el día aquí, sin embargo se tiene que ser fuerte.
"Yo que puedo sentir, yo creo que si siento tristeza eso se lo transmito a ellos y pues quien se queda mal es ella no yo".
La celebración es solo por dos horas, familiares señalan que pronto podrán celebrarlo sin que nadie los separe y la celebración duré un día entero.
"Pues ni modos nos tocó y ya hay que seguir adelante no, ya sea para que ella salga".