La Laguna: Atracción de inversión extranjera ignora bienestar de trabajadores
El modelo económico actual en La Laguna apuesta por la atracción de empresas extranjeras como clave para el desarrollo regional. Sin embargo, este enfoque, basado en el neoliberalismo, parece dejar de lado el bienestar de los trabajadores locales.
El gobernador de Coahuila, Manolo Jiménez, enfatiza la importancia de generar utilidades para los inversionistas, afirmando: "Y decirle a la raza, a ver, tú inviertes en Coahuila y te va muy bien y al final de cuentas, las y los empresarios, sí buscan que se genere empleo, buscan que se genere desarrollo, pero también buscan que se generen buenas utilidades".
En 2023, la Región Laguna vio la concreción de 50 inversiones, con 42 nuevas empresas y 8 expansiones. Estas inversiones prometen una derrama de 1,450 millones de dólares y la creación de 20,573 nuevos empleos. Sin embargo, estos empleos, ajustados a los tabuladores actuales, no garantizan una mejora en el poder adquisitivo de los trabajadores.
El presidente de COPARMEX Laguna, Jorge Reyes, afirma: "Somos una región que cumple lo que promete a los inversionistas y también hay un tema de que muchos inversionistas laguneros están decidiendo regresar a meterle su dinero a la región, y esa parte es positiva".
Si bien la perspectiva del empresariado local se centra en el bienestar del inversionista, la competitividad de La Laguna sigue estancada. A pesar de las nuevas empresas, la región se encuentra por debajo de otras en términos de calidad de vida.
El alcalde de Torreón, Román Alberto Cepeda, declaró en su segundo informe: "Estamos posicionando a nuestro querido Torreón como una de las mejores ciudades del país". Sin embargo, el Índice de Competitividad Urbana del IMCO 2023 ubica a Torreón, dentro de la zona metropolitana de La Laguna, en la posición 12 de 17 zonas evaluadas con más de un millón de habitantes. La Laguna se encuentra por detrás de regiones como Sureste, Frontera y Centro.
La llegada de inversiones y el nearshoring son vistos como aspectos positivos, pero en materia de competitividad, La Laguna se mantiene rezagada. La prioridad del modelo actual parece ser el bienestar del capital, dejando de lado el bienestar de los trabajadores y la calidad de vida de la población local.