Los cohetes o ?cuetes? y las fogatas, se han convertido en el acompañante de las fiestas decembrinas como parte de las celebraciones, sin embargo, muchas personas no consideran la contaminación que producen.
En el caso de la pirotecnia los químicos que componen a la pólvora no solo producen los colores brillantes y los ruidos característicos, sino que también generan una elevada emisión de partículas finas y gases contaminantes.
Según especialistas, la quema de pirotecnia puede contribuir a la contaminación atmosférica, afectando la calidad del aire y aumentando dióxido de azufre (SO?), monóxido de carbono (CO) y partículas suspendidas (PM2.5 y PM10) los cuales son algunos de los contaminantes que se liberan durante el uso de cohetes y cuetes.
Por otro lado, la quema de las fogatas emite grandes cantidades de dióxido de carbono (CO?) y partículas que, al igual que la pirotecnia, afectan la calidad del aire, además, los residuos sólidos que quedan tras la quema, como cenizas, trozos de madera y plásticos, pueden contaminar el suelo y las fuentes de agua cercanas.
En el caso de San Luis Río Colorado, esto se agrava debido a la problemática del basurón municipal, el cual ha sufrido incendios constantes en los últimos meses y ha afectado la calidad del aire.
A medida que las preocupaciones sobre la contaminación y el cambio climático aumentan, las comunidades deben adaptarse a nuevas formas de celebración que sean menos dañinas para nuestro planeta.