El código SALVA es un creado en la administración del gobernador de Sonora Alfonso Durazo Montaño que inicia con la llamada al 9-1-1, o de manera anónima al 089, donde se analiza el número de incidentes de violencia familiar y de género que se han registrado desde ese número.
Los reportes son atendidos por operadores y elementos de la policía certificados en perspectiva de género y derechos humanos.
Una vez ingresado al sistema SALVA, tanto víctima como agresor, van siendo canalizados a las dependencias participantes, y reciben apoyo psicológico, legal, hasta el seguimiento judicial.
La secretaría de Seguridad Pública explicó que cuando se pasa la plataforma salva al código violeta, hay una serie de datos que se les pide a las personas que llaman para medir el riesgo que puede tener la víctima y en ese momento se convierte en un llamado para el código violeta.
El Código Violeta, atiende incidentes en la línea de emergencias 9-1-1 que refieren situaciones de violencia, en los cuales se comprometa la vida, libertad, seguridad e integridad de mujeres, niñas, niños, adolescentes y personas con discapacidad.
En conferencia de prensa la secretaria de seguridad de Sonora, informó sobre los reportes que ha recibido la fiscalía gracias al implemento del protocolo salva y código violeta.
De marzo a agosto del presente año la fiscalía ha recibido 931 reportes telefónicos, siendo 48 de código violeta, que involucran a menores de 3 a 16 años. Los principales motivos: abuso sexual a menor, mujer y hombre, sustracción de menores, menor extraviado y maltrato de madres. Las principales víctimas son menores femeninas, en un 20% más que menor masculino.
Las principales víctimas son menores femeninas, en un 20% más que menor masculino.
De esta manera se busca que las y los agresores no queden impunes y que las víctimas tengan el acompañamiento necesario para contar con mejores herramientas que ayuden a superar el proceso que han vivido.