El horno de microondas se ha convertido en un electrodoméstico indispensable en la mayoría de los hogares mexicanos. Su practicidad para calentar alimentos en cuestión de segundos lo hace un aliado diario en la cocina. Sin embargo, su mal uso puede derivar en accidentes graves, algunos incluso fatales.
Uno de los errores más comunes es introducir objetos metálicos al microondas. Cubiertos, papel aluminio o recipientes con decoraciones doradas pueden provocar chispas e incendios. También se deben evitar recipientes plásticos no diseñados para altas temperaturas, ya que pueden liberar sustancias tóxicas. En cuanto a los alimentos, los expertos recomiendan especial cuidado con los huevos con cáscara, salchichas o papas sin perforar. Estos productos pueden acumular vapor internamente y explotar dentro del horno. El calentamiento de líquidos, como el agua o la leche, también presenta riesgos: al superar su punto de ebullición sin hervir visiblemente, pueden causar quemaduras al sacarlos o moverlos. Que sí y que no se puede meter al horno de microondas
Permitido:
Prohibido:
Especialistas en seguridad doméstica recomiendan revisar las instrucciones del fabricante y evitar el uso improvisado del aparato. También es fundamental mantener limpio el microondas, ya que residuos de comida pueden convertirse en focos de infección o prenderse fuego.