Al cumplirse el plazo, este 25 de octubre, para la entrada en vigor de la ley que prohíbe en la entidad Oaxaqueña, la distribución o uso de botellas desechables de plástico y los envases y embalajes desechables de unicel, comerciantes de la región del Istmo de Tehuantepec, señal que no se podrá dar cumplimiento al 100% lo que dispone la ley, siendo el principal inconveniente, el desarrollo de la pandemia del Covid-19.
El uso de artículos desechables, como vasos, platos, cucharas, botellas de agua, entre otros productos, se vuelve una herramienta primordial para la prevención de contagios del virus SARS-COV-2, siendo demandados por la población, por lo que aseguran, continuarán comercializando los artículos y uso de los mismos, hasta tener un documento oficial o informe de las autoridades, que autoricen la utilización de artículos de uso colectivo o en su caso, tener una alternativa.
Los inventarios actuales varían de acuerdo al giro comercial, que van desde los 5 mil pesos en pequeños puestos, hasta los 100 mil pesos en comercios locales específicos, esto por la alta demanda generada por la pandemia.
Es importante señalar, que de acuerdo a lo informado por el Presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) del Congreso Local, Horacio Sosa Villavicencio, las sanciones a quien o quiénes incumpla estas disposiciones van de diez a 50 mil salarios mínimos, la suspensión o revocación de concesiones o autorizaciones, decomisos, clausura temporal o definitiva o incluso el arresto.
Los pequeños y medianos comerciantes indicaron, que no se oponen a la intención general de la ley, pero dejan claro, que no es el momento para la entrada en vigor de la ley, por la situación sanitaria de la entidad.