Tras las declaraciones del ex titular del Instituto Nacional de Migración (INM), Francisco Garduño, calificando al sacerdote Alejandro Solalinde como el "Pollero de Dios", en un evento público, donde asistió el clérigo, aseguró que le desconcierta el comentario de Garduño, ya que nunca pensó que se pudiera referir de esa forma a su persona.
Alejandro Solalinde, consideró que el ex funcionario federal, pudo basar su comentario, ante un resentimiento a su persona, cuando le exigió que cambiara, que transformara al instituto, pero Francisco Garduño le respondió que no cambiaría nada, a lo que el defensor de los derechos de los migrantes le pidió que renunciara, negándose, por lo que se convirtió en un obstáculo para el cambio que proponía el ex presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Con respecto al calificativo "Pollero de Dios", dijo que Francisco Garduño, como titular del Instituto Nacional de Migración, si tenía las pruebas y fundamentos de sus declaraciones, tenía el deber y la obligación de presentar una denuncia a las instancias correspondientes, más nunca lo hizo, incluso nuca le hizo un cometario personalmente, en las muchas ocasiones que interactuaron, lo que deja sin validez su comentario.
El padre Solalinde, enfatizó que no le guarda rencor, al contrario, se compadece por el proceso que lleva con la muerte de 40 migrantes y los 27 lesionados, hechos que han marcado la carrera política del ex titular del Instituto Nacional de Migración.