Muerte y dolor, han dejado los conflictos agrarios en Oaxaca, aunque estos conflictos son añejos, ya suman más de 100 muertes por estos enfrentamientos y tan solo durante el 2023 se han contabilizado 24 personas que han perdido la vida por estos ataques armados, en la mayoría de los casos han sido emboscadas.
El Programa Estratégico del Registro Agrario Nacional 2021-2024, indica que en México se tienen identificados más de 500 conflictos agrarios, 80% de ellos catalogados de gran relevancia, más de la mitad de estos conflictos se ubican en el territorio Oaxaqueño.
Oaxaca concentra 283 conflictos agrarios, lo que equivale a 56.6% del total de conflictos existentes en el país, de los cuales 23 son considerados de alto riesgo, 51 de mediano riesgo y 208 de bajo riesgo.
Este panorama violento, da paso a un problema agrario más en Oaxaca, el desplazamiento forzado, un fenómeno antiguo en nuestra sociedad, que lacera a los más vulnerables, comunidades indígenas principalmente.
De acuerdo a la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos (CMDPDH), en México, el total de personas desplazadas internamente por la violencia hasta diciembre de 2021 asciende a 379 mil 322.
En este reporte, Oaxaca se posiciona en el número 6 de entidades con mayor número de desplazados, 423, registrándose en 2 episodios de desplazamientos, afectando 4 municipios.
Entre los conflictos agrarios que han escalado o estallado durante el primer año de Jara Cruz destaca el que existe en San Miguel El Grande, con ocho muertos, cuatro secuestrados y varios ataques con armas de fuego de uso exclusivo del ejército, por lo que destacan la posible intromisión de grupos delictivos.