La industria automotriz en México se tambaleó con el anuncio de imposición de aranceles del 25% a todos los vehículos que no sean producidos en Estados Unidos.
"Lo que vamos a hacer es un arancel del 25% en todos los autos que no se fabriquen en los Estados Unidos, si son hechos en Estados Unidos no habrá arancel, empezamos con una base del 2.5%, que era lo que teníamos y ahora subimos a 25%", anunció Donald Trump, presidente de Estados Unidos.
En Coahuila la fabricación de autos y autopartes es el principal negocio en materia de exportación. En concreto son dos empresas norteamericanas las que arman vehículos en el sureste del estado: General Motors y Stellantis, mismas que se verían seriamente afectadas con la imposición arancelaria de Donald Trump.
"Se están haciendo acercamientos con el gobierno para ver cómo desarrollar nuevos mercados, cómo hacer que el mercado interno se fortalezca, el gobierno federal está haciendo lo propio", comentó Pedro Aguirre, presidente de Canacintra Gómez Palacio.
En 2023 la producción de autopartes en Coahuila cerró en 18 mil 452 millones de dólares, siendo el número uno del país por encima de Guanajuato, con 15 mil 918, Nuevo León, con 14 mil 800, Chihuahua, con 10 mil 648 y Querétaro, con 9 mil 551 millones de dólares.
"La relación con Estados Unidos es muy importante, por eso le apostamos a Texas y le apostamos a que esta ruta de la negociación entre México y Estados Unidos va a llegar a buen puerto, porque ni A Estados Unidos ni a México le conviene que llegue a mal puerto", comentó Manolo Jiménez, gobernador de Coahuila.
Coahuila es el primer estado a nivel nacional en producción de vehículos eléctricos, con el 71% del total. Además, en 2024 aumentó 3.8 veces su producción. La imposición arancelaria podría obligar a las armadoras a migrar parte de la fabricación de sus productos. La industria se mantiene tensa.