La región de Tehuacán sufre de contrastes ambientales en materia de protección, y es que contrario a lo que sucede con la Reserva de la Biosfera Tehuacán-Cuicatlán como zona natural protegida, la reserva estatal del Cerro Colorado es una de las más afectadas por la invasión de asentamientos humanos, misma que ha perdido un promedio de 100 hectáreas en los últimos años, reconoció Jorge Balderas Ortiz, uno de los impulsores para declaratoria de este ecosistema como área natural protegida.
El último estudio en la zona estima que la reserva del Cerro Colorado se compone de unas 35 mil hectáreas tanto de bosque como de semidesierto, lo que motivó a su declaratoria de área natural impulsada desde el municipio de Ajalpan y que considera terrenos en Tehuacán, Chapulco, Nicolás Bravo y otras localidades de Veracruz; sin embargo, es en el municipio de Tehuacán en donde más se han extendido el centro población, afectando al menos 100 hectáreas.
De acuerdo con Balderas, las afectaciones en este hábitat se dan continuamente por el cambio de uso de suelo ante el establecimiento de viviendas y servicios básicos, algo que impacta en la vegetación y fauna, por lo que se han iniciado hasta ahora seis denuncias ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y se busca, como en la Reserva de la Biosfera Tehuacán-Cuicatlán, una serie de medidas más exigentes para los daños que ahí se provoquen.
Precisó que la afectación puede evitarse si existiera un trabajo conjunto con los ejidos, pues la lotificación de terrenos puede seguirse realizando atendiendo las normas de impacto ambiental en dicho ecosistema regional.