Una de las constantes que se han detectado en los casos de pacientes dependientes a alguna sustancia nociva que atiende el Centro de Rehabilitación para Enfermos con Adicciones Tehuacán (CREAT), es que estos llegan a buscar ayuda, con el antecedente de ya haber sido internados en otros anexos en al menos 3 o 4 ocasiones previas, mismos de los que arrastran las malas experiencias y que les impiden tener la confianza para dejarse ayudar, pues al ser lugares que no se encuentran regulados formalmente, muchas veces los internos son maltratados, no reciben la atención médica y psicológica adecuada, e incluso viven hacinados.
Respecto a ello Humberto Merino Hernández coordinador del CREAT, expuso que aunque la intención de los anexos es buena, desafortunadamente se han convertido en un negocio para las organizaciones que los administran, siendo el principal problema de estos lugares el hacinamiento de las personas, sobre todo porque en la región la necesidad es mucha ante los altos índices de drogadicción que se registran, pues de acuerdo a las experiencias que narran la mayoría de pacientes, en estos lugares, en una sola habitación llegan albergar hasta 40 personas, haciendo complejo controlarlos, pues al presentar conductas de ansiedad por no consumir la droga, recurren a golpearlos para calmarlos.
Sin embargo sigue siendo la desesperación de las familias lo que hace buscar la ayuda de esos lugares para que su familiar salga de la adicción, sin tomar en cuenta que este proceso únicamente ocasiona que al salir, el paciente vuelva a recaer.