Ante un escenario de mejora económica para el sector taxista, derivado del regreso a clases presenciales de los alumnos, sumado a la alta demanda de servicios por la temporada de lluvias, pero que se ve amenazado por una quinta ola de contagios covid-19, que podría volver a generar afectaciones económicas para todos los sectores. El gremio taxista de manera voluntaria busca retomar las restricciones sanitarias al interior de las unidades, tales como el plástico divisor entre conductor y usuario, el uso obligatorio de cubrebocas al abordar la unidad y la sanitización diaria de cada vehículo o después de un servicio.
De acuerdo a lo compartido por integrantes del gremio taxista, se busca evitar un alto contagio por covid-19, que orille a las autoridades a volver a decretar restricciones extremas como el confinamiento o la reducción de horarios para la operatividad del transporte público, medidas que en la primera ocasión que se implementaron, dejaron una caída económica de la que apenas empieza a salir, ya que para el primer semestre del 2022 el gremio taxista ha alcanzado apenas un 80 por ciento de reactivación económica, que se espera continúe creciendo con el incremento en 100 por ciento de la demanda de servicios que deja la temporada de lluvias.
En este sentido, también se hace el llamado para que los usuarios de taxis colaboren con las medidas sanitarias, tanto por protección de los conductores como de los clientes, pues es principalmente el sector adulto mayor el que atiende los protocolos al abordar una unidad, mientras que los más jóvenes son más descuidados para hacerlo.