A comparación del año pasado, concesionarios se han percatado que durante las últimas fechas han disminuido los robos a unidades del transporte público, ahora el problema es que se han cambiado los modus operandi, pues hoy en día los delincuentes simulan a una familia para realizarle la parada al taxi, ya que van en circulación los maleantes amagan al conductor para despojarlo de sus pertenencias y efectivo.
Esta situación ya genera una desconfianza a los choferes, pues aseguran que ya no saben en quien confiar, anteriormente trataban de evitar levantar a hombres en pareja o en grupo, esto principalmente en la noche, pero ahora tienen que cuidarse hasta de supuestas familias, quienes han asaltado a los taxistas en diferentes horas del día, aunque no tienen un número registrado de este tipo de ilícitos, aseguran que son varios los detectados.