Las familias buscadoras, agrupadas en la Unificación Nacional contra la Desaparición, han convocado a la Segunda Jornada de Búsqueda, que se llevará a cabo el 19 y 20 de abril en todo el país
En una conferencia de prensa, Juan Carlos Trujillo Herrera, representante de la Red Nacional de Enlaces, y Verónica Rosas, de Uniendo Esperanzas, anunciaron que más de 70 colectivos participarán en esta acción, que se realizará sin el apoyo de las autoridades de los tres niveles de gobierno.
Ante la alarmante cifra de más de 123,000 personas desaparecidas y miles más aún sin identificar, los colectivos han decidido organizarse nuevamente para continuar la búsqueda de sus seres queridos. Estos grupos destacan que su labor es una manifestación de amor y esperanza, reafirmando que, unidos una vez más, buscan visibilizar la dolorosa ausencia de los desaparecidos.
Durante esta jornada, los participantes se desplazarán a ciudades, campos, cerros y desiertos para buscar a aquellos que han sido arrebatados por la violencia y la inacción del Estado
Pidieron que se sumaran todas las personas solidarias y organizaciones sociales para que se sumen a esta búsqueda. Los colectivos señalaron que buscan a sus seres queridos, quienes fueron arrebatados "por un Estado que no investiga ni ofrece respuestas".
Hicieron un llamado a las iglesias y comunidades para que ofrezcan esperanza y solidaridad, así como a artistas y académicos para que utilicen su voz y conocimiento para visibilizar esta tragedia
El pasado 13 de abril, un grupo de madres buscadoras de distintas entidades del país realizaron una clausura simbólica del Senado de la República en protesta por la postura de los senadores oficialistas frente a la crisis de desapariciones en México.
Yoltzin Martínez Corrales, madre buscadora del estado de Guerrero, criticó duramente al senador Gerardo Fernández Noroña por minimizar el fenómeno de las desapariciones, al mencionar que, el senador no busca como los colectivos, puesto que, no entra a los desiertos ni a las alcantarillas y claramente no viven el terror que enfrentan las madres buscadoras, según lo expresado por Martínez Corrales.