Durante la pandemia de Covid-19 las ventas de libros disminuyeron drásticamente, lo que provocó que cientos de librerías cerraran sus establecimientos.
Tan solo hasta el 2019 las ventas promedio se mantenían alrededor de los 5000 libros al año, en 2022 las ventas ya no rebasaron los 1000 ejemplares.
Para este abril mes de la lectura, el panorama no ha cambiado.
Son literatura infantil y libros de pedagogía lo que más se consume en las librerías del Estado de México, pese a ello, la mayor preocupación para los jugadores del mercado editorial es que la baja producción y la poca demanda aumenten.