En estas fechas a las orillas de la carretera México-Toluca el espíritu de Halloween cobra vida a través de artesanos locales, los cuales ofrecen una amplia gama de artículos decorativos hechos a mano, desde calabazas esculpidas con detalles macabros hasta calaveras elaborados con habilidad y creatividad en barro.
Los precios varían, pero la mayoría de estos tesoros de temporada oscilan entre los 150 y los 200 pesos, lo que permite a los viajeros llevar consigo un pedazo del espíritu de Halloween en su camino hacia la Ciudad de México