Feminicida de Atizapán. Una historia de impunidad

Son los rostros del dolor, los que no se olvidan, los de la impunidad. 

Son los rostros de mujeres que han permanecido desaparecidas y que hasta hoy sus nombres son objeto de búsqueda. 

Se trata de Flor Ninive, y Rubicella Gallegos probables víctimas del feminicida de Atizapan. 

Su nombre es Andrés Filemón, quien de acuerdo con la relatoría del agente del Ministerio Público, aceptó haber asesinado a Reyna, a quien conoció en un puesto de accesorios de telefonía, además de a 4 mujeres más. 

Norma Jiménez, a quien asesinó hace 20 años 

y Berenice Sánchez Olvera, a quien conoció en el Bar "El Marinero".

Así como a Flor Ninive y Rubicela, según lo dicho en la audiencia. 

Hechos por los cuales podría recibir mínimo 40 años de prisión. 

De acuerdo con la familia de Flor Ninive, a ella la conoció en el Bar "El Barrigón". 

Pero para determinar si los restos óseos encontrados en la casa de Andrés Filemón corresponden a flor, su hermano se sometió a pruebas de ADN, cuyos resultados estarán listos la próxima semana. 

Andrés Filemón declaró que las asesinó al sentir que se aprovechaban de él, lo que a decir de activistas habla del estado de descomposición social.

Pero también del grado de impunidad y falta de investigación por parte de las autoridades. 

Hasta el momento se desconoce cuántas mujeres podrían haber sido víctimas del sujeto que ve en pantalla, pues solo fue vinculado a proceso por el feminicidio de Reyna. 

En tanto, los demás rostros siguen en la impunidad.