De acuerdo con cifras de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda Valle de México, se requiere construir al menos 110 mil viviendas anuales para satisfacer la demanda de los mexiquenses.
Sin embargo, la realidad es que la oferta actual se encuentra muy por debajo de esta cifra, generando un déficit histórico que impacta de manera directa en la calidad de vida de miles de familias.
El desarrollo de vivienda en el Estado de México se ve obstaculizado por diversos factores, entre los que destaca la falta de infraestructura y servicios básicos en los polos de construcción.
Esta deficiencia dificulta la conexión de los nuevos desarrollos con el resto de la ciudad y limita el acceso a servicios esenciales como agua, drenaje y transporte público.
La llegada de inversiones y el fenómeno de relocalización de empresas ha generado una mayor demanda de vivienda, sumándose a las condiciones de costo y espacio que existen en la Ciudad de México, la cual ya no es una opción viable para muchas personas.
La capacidad de producción del sector privado en el Estado de México es de aproximadamente 22 mil viviendas al año, una cifra muy por debajo de la demanda existente. lo que ha convertido a la vivienda, en un privilegio al alcance de pocos.
La vivienda, lejos de ser un privilegio, es un derecho humano fundamental. El déficit habitacional en el Estado de México pone de manifiesto la necesidad de políticas públicas que fomenten la construcción de vivienda y garanticen el acceso a una vivienda digna para todos los mexiquenses.