El ambiente político en México se encuentra en un estado de polarización. En la medida en que se aproxima el proceso electoral, se perfilan un escenario complejo, marcado por la división entre dos bloques principales: el oficialismo y la oposición.
Datos del Índice de Paz México 2023 indican que la polarización política se ha arraigado profundamente en la sociedad mexicana. 52% de los ciudadanos perciben una división extrema en el país y un 65% descarta superar estas brechas.
A decir del analista político y especialista en política exterior, Adrián Kim (@adrikimben) desde el gobierno, se ha adoptado una "estrategia política" que busca clasificar a la población en dos sectores claramente definidos, alimentando así la polarización.
Esta táctica ha "permeado" en el entorno mediático, exacerbando aún más las divisiones y socavando la posibilidad de un debate público informado y respetuoso. A lo que advierte que el próximo proceso electoral podría ser el más polarizado en la historia reciente de México.
Estudios realizados por el Observatorio Electoral de Medios y Redes Sociodigitales de la UNAM han confirmado que la polarización no sólo genera fracturas en la sociedad, sino que también representa una amenaza para la salud de la democracia.
El libre ejercicio de la democracia dependerá de la capacidad que tengan los actores políticos y sociales para superar la polarización y construir un clima de diálogo y consenso.