Cosechan con calidad por técnicas orgánicas

Familias participantes en el proyecto de huertos de traspatio en Tuxpan han aprendido a trabajar la tierra de sus jardines y solares aplicando técnicas orgánicas y obteniendo como resultado, mejores cosechas en las hortalizas que consumen. 

"La gran diferencia que sí notamos es que el sabor es mucho mejor y el tiempo de vida de anaquel del producto es más largo. Cualquier especie, cualquier hortaliza se puede desarrollar muy bien siempre y cuando tenga la suficiente humedad" Hugo Cruz Hernández, Vecino de Higueral.

Personal de la Brigada de Educación para el Desarrollo Rural número 18 asegura que han dejado a un lado el uso de herbicidas utilizando técnicas manuales que dieron como resultado productos de mayor resistencia a los tiempos de sequía y las altas temperaturas que se registran.

"Productos que no son dañinos y que pueden nutrir nuestros suelos y que eso nos hace que tengamos un huerto de traspatio de tal manera que sea orgánico, para que nuestras frutas y nuestras verduras no estén contaminadas" Gicela Viveros Molina, Jefa de la Brigada de Educación para el Desarrollo Rural 18.

Con la aplicación de biofertilizantes elaborados a base de materiales orgánicos y con la ayuda de malezas ricas en nitrógeno y fósforo, han aprendido a aportar nutrientes para mejorar el desempeño de las plantaciones. 

"La intención es que evitemos usar cualquier tipo de productos químicos que afectan nuestras plantas, nuestras hortalizas, los suelos los hacen más pobres, pierden sus nutrientes" Gicela Viveros Molina, Jefa de la Brigada de Educación para el Desarrollo Rural 18.

Además de conocer las fechas de siembra, formas de riego y cultivo, producen abonos económicos a base de melaza, suero, sales, hongos y tierra vega.

"Teniendo un manejo orgánico, el costo es muy bajo, por que los productos los consigues aquí en la misma comunidad, el único costo alto sería la semilla desde el inicio, por que ya sí cosechas puedes obtener la semilla" Hugo Cruz Hernández, Vecino de Higueral.

Capacitadores afirman que de esta manera se brinda educación para dejar a un lado las prácticas nocivas para la salud de los consumidores, asegurando además la limpieza del aire, agua y suelo que los rodea.