Autoridades educativas de la región norte de Veracruz aseguran que los robos y actos vandálicos al interior de las escuelas se han acrecentado alarmantemente en tiempos de pandemia.
"De marzo a la fecha al menos cuatro robos con destrucción de bastante parte del inmueble que si nos ha afectado de manera significativa, lo que más nos ha afectado es la destrucción de puestas, ruptura de ventanas, vidrios, buenos que se han llevado el material didáctico de los niños" Tanía Valero, Supervisora de la zona 02 de educación especial federal.
"La escuela ha sido visitada en tiempo de la pandemia cuatro veces, te la pongo así clarita, a primera se metieron a robar la bomba del agua, como vieron que no había problema, se llevaron parte del cableado de luz" Javier Benitez Ponce, Supervisor Escolar de Telesecundarias en Tuxpan y Tamiahua.
Sus pruebas discrepan con el saldo blanco que las autoridades de seguridad anuncian en sus reportes.
"Yo creo que el plan de vigilancia de la Secretaría de seguridad Pública del Estado pues no ha funcionado, en el caso de las Telesecundarias que tengo a mi cargo tanto en Tuxpan como en Tamiahua te pongo que cuatro han sido robadas. No se con exactitud el número de escuelas primarias, pero es mentira que haya saldo blanco con respecto al robo de escuelas en el municipio de Tuxpan y la región, eso es obvio. " Javier Benitez Ponce, Supervisor Escolar de Telesecundarias en Tuxpan y Tamiahua.
Desafortunadamente serán los educandos quienes resulten más afectados ante esta situación.
"Es bastante amplia la afectación que tenemos sobre todo por el hecho de que por ejemplo tenemos sillas de ruedas especiales, que tenemos para que los niños puedan trabajar dentro del aula. Por ejemplo libros de texto en braille que no les sirve más que al niño que va a ser atendido, lo destruyan, pues ya no tiene el niño un material para poder trabajar, esto si impacta bastante" Tanía Valero, Supervisora de la zona 02 de Educación Especial Federal.
La problemática va más allá de las denuncias que realizan los docentes ante instancias de seguridad, ya que en tiempos de austeridad, difícilmente se repondrán los objetos perdidos, siendo los padres de familia los que se verán obligados a costear los materiales más urgentes para que sus hijos puedan recibir una educación digna.