Trabajadores del sector obrero y del área metal-mecánica de la zona norte de Veracruz no han podido salir a trabajar a países de Latinoamérica, Europa o Medio Oriente a causa de la pandemia, por lo que esperan retomar actividades el próximo año.
"Cuando uno sale fuera a trabajar en lo primero que te pones a pensar es en la familia y justamente por la familia haces esos sacrificios, por que para empezar la pega es mejor que en México, por medio de las salidas del país que por cierto no son muchas, pero cuando hay, se tienen que aprovechar son muy bien pagadas" Rodrigo Gaona, Obrero.
Para construir plataformas, barcos y reparar estructuras marinas es común la contratación de obreros norveracruzanos en países como Estados Unidos, Canadá, Israel, Ecuador, Trinidad y Tobago, Guatemala, Honduras y Brasil.
"Hay mano de obra muy calificada en el ramo de la metal mecánica sobre todo, soldadores, tuberos, paileros, eléctricos, instrumentistas y maniobristas que eventualmente salen a los países" Alfredo Pérez Díaz, Secretario General de la Federación de la Región Huasteca CTM.
Los requisitos y normas de salud a cumplir son estrictas, las cuales debido a la pandemia se han endurecido aún más.
"Las medidas sanitarias que se aplican en estas regiones son las que sostiene el país y la Organización Mundial de la Salud, ellos tienen que atenerse a los protocolos que previamente se les dan a conocer desde aquí o en la frontera del país a donde van" Alfredo Pérez Díaz, Secretario General de la Federación de la Región Huasteca CTM.
Desde hace varios meses a causa del Covid-19, las posibilidades de obtener un contrato internacional donde perciban salarios cotizados en dólares se han quedado detenidas.
"Había dos o tres trabajitos pendientes para volver a salir fuera del país pero ahorita está detenido todo. Te pones a pensar, si vas a salir y no vas a ganar y estar parado sin ganar, tampoco no es opción, todo esto está pegando muy fuerte" Rodrigo Gaona, Obrero
Sufriendo por condiciones climáticas adversas, disposiciones políticas extremas e incluso discriminación, estos trabajadores resisten las adversidades con la única finalidad de brindarle a los integrantes de su familia la calidad de vida, que con un trabajo en la región difícilmente podrían costear.