La pandemia de COVID-19 impactó en la salud mental del personal médico, con síntomas como depresión y ansiedad, reconociendo autoridades de la Director General de los Servicios de Atención Psiquiátrica (SAP) de la Secretaría de Salud que algunos profesionales médicos que estuvieron en la primera línea de atención presentaron síntomas como conducta suicida y adicciones.
Ante ello fue necesario implementar un plan de prevención y cuidados de la salud integral y mental ya que la pandemia mostró la necesidad de que la atención a la salud mental sea prioritaria desde la formación médica, contando con 93 mil personas que laboran en centros de salud que tienen los conocimientos necesarios para detectar problemas mentales y adicciones; incluye profesionales de la medicina, enfermería, psicología y trabajo social.
En cuanto al impacto de la pandemia en la salud mental de la población en general, indicaron que el 70 por ciento de las personas que padecen COVID-19 experimentan al menos un síntoma posterior a la infección, como pérdida del sentido del olfato y del gusto, y 25 por ciento tiene fallas cognitivas lo cual también, puede ocasionar deterioro en la concentración, la memoria, lenguaje y funciones cognitivas; ansiedad, depresión, y desregulación emocional conductual con orígenes neurodegenerativos.