Aunque la violencia en contra de la mujer, no distingue estratos sociales, ni edades, es en las zonas marginadas y comunidades en donde más situaciones de esta indole se registran, asociandose el maltrato fisico e incluso sexual a cuestiones de costumbres u obligaciones maritales.
Ángel Álfaro Castelán, Secretario de Seguridad Pública Municipal, menciono que ante la dependencia, se registran aproximadamente una vez por semana un caso de maltrato físico en contra de la mujer o infantes, pero este acto no trasciende a violencia intrafamiliar o de género porque la víctima no denuncia, atribuyéndolo a los factores antes mencionados, y aunado a situaciones de pudor y vergüenza, se reporta más la violencia física que la sexual
Asimismo, Mayarit Martinez, representante de la Fundación Mexicana para la Planeación Familiar consideró que al ser las mujeres de zonas marginadas, las que mayor situación de violencia reportan, las instancias deben cambiar las estrategias a una atención extramuros, centrándose en la prevención.
Disminuir la violencia en contra de la mujer, es una tarea no solo de las autoridades sino
también de la sociedad, que debe dejar a un lado tabúes o miedos y denunciar, a
la par de reeducarse y fomentar estos valores de respeto en las nuevas
generaciones.