Enfermedades renales crónicas preocupan ante COVID-19
La enfermedad renal crónica es una patología que no sólo genera enormes gastos, sino que es un problema social. En los adultos la diabetes y la hipertensión son las principales causas de muerte ligadas al COVID-19 entre otras.
De acuerdo a los expertos una de cada 10 personas podría tener enfermedad renal crónica en etapas no avanzadas; de ahí, la importancia de la detección temprana.
La enfermedad renal crónica es una patología que no sólo genera enormes gastos, sino que es un problema social.
"La enfermedad renal es asintomática no duele, no siento yo un tipo de molestia es una patología que genera mucho gasto y es un problema social, los estudios modernos han demostrado que no solo la diabetes y la hipertensión son las causas, sino que se han encontrado otros elementos."
Pero en todos los casos, una vez que se establece daño en ese órgano es irreversible y progresa de forma continua, requiere diálisis o un trasplante en los casos más afortunados.
"Progresa y avanza de forma continua cuando genera todos estos gastos, el tratamiento una vez que se llega a la insuficiencia renal terminal solamente existe la diálisis en términos generales es un buen tratamiento, simplemente es demasiado caro y a veces demandante en el momento de complicaciones."
La incidencia mundial de la enfermedad renal es un tanto discutida y las cifras no son exactas. En países desarrollados se estima que existen de uno a tres casos en estados terminales por cada millón de habitantes, pero ésa sólo es la "punta del iceberg", porque "hacia abajo" habría miles de enfermos que aún no presentan síntomas.