Israel y Hamás, a un paso de la paz
Las negociaciones entre Israel y Hamás para alcanzar un acuerdo de cese al fuego en Gaza están avanzando rápidamente, con ambos lados acercándose a una solución tras 15 meses de intensos combates.
El 14 de enero, funcionarios mediadores confirmaron que Hamás aceptó un borrador del acuerdo, el cual también contempla la liberación de decenas de rehenes. Qatar, uno de los mediadores clave, expresó que ambas partes se encuentran en el "punto más cercano" para alcanzar un entendimiento. Sin embargo, aún falta la aprobación final por parte del gabinete israelí.
El acuerdo propuesto tiene una estructura de tres fases y fue diseñado bajo el marco establecido por el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y respaldado por el Consejo de Seguridad de la ONU.
El primer paso de este plan incluye la liberación gradual de 33 rehenes israelíes a cambio de la liberación de prisioneros palestinos encarcelados en Israel, lo que podría implicar cientos de mujeres y niños. Durante las primeras seis semanas, los israelíes también reducirían su presencia en zonas clave de Gaza y permitirían un aumento significativo en la entrega de ayuda humanitaria.
El proceso ha sido posible gracias a los esfuerzos coordinados de mediadores internacionales, como Estados Unidos, Egipto y Qatar, quienes han estado trabajando durante todo el año para poner fin a los horrores de este conflicto. Al menos 100 israelíes siguen siendo retenidos en Gaza tras el ataque de Hamás el 7 de octubre de 2023, y muchos temen que un tercio de ellos ya hayan muerto.
Los esfuerzos para concluir el acuerdo se han intensificado con la proximidad de la investidura de Donald Trump como presidente de EE. UU., quien se ha sumado a las negociaciones en la región.
Aunque las negociaciones han mostrado avances, aún persisten desacuerdos sobre la segunda fase del acuerdo, en la que Hamás liberaría a más rehenes a cambio de una retirada israelí completa de Gaza. Sin embargo, este punto sigue siendo un tema de gran tensión, ya que el gobierno israelí ha condicionado cualquier retirada a la desmilitarización de Hamás, lo que complica la situación. A pesar de estos obstáculos, los mediadores han expresado optimismo en que el proceso continúe según lo planeado.
En la tercera fase, el acuerdo contempla la devolución de los cuerpos de los rehenes restantes, así como un plan de reconstrucción para Gaza que podría extenderse entre tres y cinco años, supervisado por organismos internacionales. Este componente busca garantizar la estabilidad y la reconstrucción de Gaza después de más de un año de devastación, que ha desplazado al 90% de la población de la región, con cientos de miles de personas viviendo en condiciones de extrema precariedad.
La guerra en Gaza ha tenido un costo humano incalculable. Según el Ministerio de Salud de Gaza, más de 46,000 palestinos han perdido la vida desde el inicio del conflicto, muchos de ellos mujeres y niños.
A pesar de las negociaciones, los ataques israelíes continúan y el reciente bombardeo en Gaza mató a al menos 18 palestinos, incluidos varios niños. Mientras tanto, los hutíes de Yemen han intensificado sus ataques contra Israel, complicando aún más la situación en la región.
Con la región en tensión y las expectativas centradas en un acuerdo inminente, las próximas semanas serán cruciales para determinar el futuro de Gaza y el impacto del alto el fuego en la región. Aunque el camino hacia la paz sigue siendo incierto, el progreso en las negociaciones ofrece una luz de esperanza para poner fin a uno de los conflictos más destructivos de la historia reciente.
