En México, la salud mental se ha convertido en un problema severo, afectando a una parte significativa de la población.
Según datos del Instituto Nacional de Psiquiatría, alrededor del 25% de las personas entre 18 y 65 años presentan algún problema de este tipo, pero solo el 3% busca atención médica especializada. ?
Mientras que el 19.3 por ciento de la población adulta padece síntomas severos de ansiedad y más del 30 por ciento los presenta de forma leve o moderada.
Especialistas señalan que este aumento se atribuye, en parte, a los efectos de la pandemia por COVID-19, aunque los adolescentes y jóvenes son los más perjudicados.
La falta de atención médica a este tipo de problemas, podría generar severas consecuencias, en donde las reacciones de las personas ante ciertas situaciones las lleva a cometer asesinatos, suicidios, agresiones de todo tipo, entre otras cosas.
Legisladores de Veracruz e incluso la gobernadora del Estado Rocío Nahle coinciden en que es necesario que en las escuelas cuenten con psicólogos y especialistas para atender conductas que pudieran agudizar problemas emocionales que a la larga tengan repercusiones serias.
Pese a la alta prevalencia de estos trastornos, persisten carencias importantes para acceder a servicios de salud mental públicos, a ello se le suma la estigmatización y la discriminación hacia quienes padecen estas afecciones que dificultan que busquen y reciban el apoyo médico. Por lo que urge que se destinen los recursos para los nosocomios así como los especialistas y medicamentos para atender a los pacientes.
De acuerdo a las Secretaría de Salud Federal en 2024 se atendieron a 303 mil 356 personas en el país por diversas causas dirigidas a la salud mental.