El comisario de Seguridad Pública de Teocaltiche, Ramón Grande Moncada, de 50 años, asesinado la tarde del martes, fue señalado de tener relación con un grupo del crimen organizado en un video que fue difundido en redes sociales el pasado mes de febrero, sólo unas horas después de que desaparecieron ocho policías municipales y un chofer de transporte privado, del día 18 de ese mismo mes.
Aquel día los oficiales se dirigían a Guadalajara para renovar sus exámenes de control y confianza cuando desaparecieron junto con el chofer que los llevaba en una camioneta tipo sprinter. Al día siguiente, 19 de febrero, cuatro de esos policías fueron localizados, desmembrados en varias bolsas sobre la Carretera Teocaltiche - Villa Hidalgo, a la altura del poblado La Esperanza.
Ese mismo día circuló en redes sociales un video en el que aparecían dos de los policías desaparecidos, Miguel , de 29 años, y Enesto, de 37. Ambos señalaron que el comisario Ramón Grande Moncada estaba relacionado con el crimen organizado. "Mi nombre es Miguel Orozco Ramírez, les digo que Sedena nos enseña a hacer explosivos para los drones y el que se comunica directamente es el Director de Seguridad Pública, Ramón Grande, y el mismo tiene línea directa con el teniente Benítez, quien recibe nómina de "El Güero" o alías 9-7".
"Mi nombre es Ernesto Alonso González, soy comandante de la Policía de Teocaltiche, por ahí las lacras nos obligan a usar la radiofrecuencia para estar en coordinación y nos mandan por delante para los enfrentamientos, para ellos salir libres"..
Ese mismo día 19, la policía del Estado y las fuerzas federales tomaron las instalaciones de la Comisaría de Seguridad Pública de Teocaltiche y Villa Hidalgo, y se hicieron cargo de la vigilancia en los dos municipios. Además comenzaron con revisiones al armamento, la licencia colectiva y el estatus administrativo de todos los elementos.
Desde esa fecha, la Policía del Estado y las fuerzas federales han asegurado varias casas de seguridad, armas de grueso calibre, droga, vehículos blindados, algunos de ellos conocidos como "monstruos", además de dos Centro de Comando y Control (C2), que eran controlados por el crimen organizado, uno en Villa Hidalgo el 12 de marzo y otro en la instalaciones del a Comisaría de Teocaltiche, 21 de febrero.